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De Principes despeinados, con vaqueros y gafas de sol

Un jueves dificil

El 12 de febrero quedará en este blog como un dia bastante duro, una agenda apretada y además, llena de tensiones. Y es que el día comenzaba a eso de las 07.00 de la mañana, cuando mi iphone sonaba avisandome de que tenia 30 minutos para desayunar y arreglarme, contaba con el tiempo justo para llegar al hospital con mi Abuela, porque operan a mi abuelo y no sabemos la hora, lo mismo es el primero que el último y nos tienen todo el día esperando. Cuando llegamos al Hospital nos dice mi abuelo que ha dormido poco y que ya han estado los enfermeros preparandolo para la operación, entra en quirófano a las 08.15. Todavía son las 07.45.

A eso de las 08.00 viene el celador y nos dice que nos vamos a quirófano, asi que vamos en procesión detras del celador que va empujando a mi Abuelo por los pasillos de, aun oscuros, del Hospital. Al llegar a la entrada nos despedimos de él, y es en el momento en el que lo perdemos de vista cuando siento un escalofrío por el cuerpo, la última vez que entro para una "sencilla operacion de colon" casi lo perdemos, A eso de las 12.00 después de casi 4 horas esperando nos llaman para decirnos que todo ha salido bien, que está en el post operatorio y que el riñon sigue en su sitio, que no han tenido que estirparlo, pero que aun no podemos entrar a verlo. El alivio en las caras de los que alli estabamos era visible a varios cientos de kilómetros, se nos notaba a leguas, por fin podíamos descansar. Fue en ese momento, cuando ya solo teniamos que esperar a que saliera del post operatorio cuando yo me fui a tomar café, Lo necesitaba.

Mientras tomamos café me dicen de ir a la rueda de prensa del Recreativo, y alli que fui, nada que destacar, y montandome en el coche para poner rumbo al hospital cuando suena el teléfono -TITA ESTHER - y tengo que reconocer que el pánico se apoderó de mi, pero fue solo un instante, me llamaba para que fuera a recojer a mi prima al instituto para llevarla al hospital. Y eso hice.

Las primeras palabras que nos recibieron al llegar al hospital fueron "Aquí está el tio, jejejeje, eso es lo que ha dicho manolo al salir" decía mi abuela con una cara entre cansancio y felicidad, Todo va bien.

Por la tarde, tocaba rematar la faena, HORA Y MEDIA DE PROGRAMA, un programa que cada día suena mejor, o eso dicen, pero en fin, en ese tiempo de programa nos hemos reido, nos hemos puesto serios y hemos repartio leña para todos. En fin, un día en el que los amigos no han estado, o han estado poco, y siguen teniendome a un lado, pero eso es algo que ya es costumbre y terminaré por sobrellevarlo.

En fin, haber como se desarrolla el día de mañana

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