Sensación de Libertad
Imagina conmigo que te despiertas en tu cama, como cada mañana, te das una ducha, desayunas sin prisas, estás de vacaciones, te acercas al armario y eliges con calma que vas a ponerte hoy. Coges las llaves de casa y de tu vehículo, bajas al garaje, y te dispones a pasear con tranquilidad buscando un sitio donde relajarte y perderte en el paisaje. ¿Donde aparcas? pues donde haya un sitio, ¿eres libre de verdad? hombre, he venido encerrado en un habitáculo de unos dos metros cuadrados, pero creo que sí que soy libre. Esta situación puede cambiar, ¿no me crees? vamos a cambiar algo, y tu me dices.
Imagina conmigo que te despiertas en tu cama, como cada mañana, te das una ducha, desayunas sin prisas, estás de vacaciones, te acercas al armario y eliges con calma que vas a ponerte hoy, Coges las llaves de casa y de tu vehículo, bajas al garaje, y te dispones a pasear con tranquilidad buscando un sitio donde relajarte y perderte en el paisaje, durante el trayecto a tu destino notas el viento en la cara y el pecho, el sol te ilumina prácticamente todo el cuerpo, notas la velocidad en todos los poros de la piel, ya que es tu cuerpo la carrocería del vehículo, vas sin prisa, pero es totalmente diferente ir sobre dos ruedas, todo parece más amplio, todo parece más bello, todo parece distinto. Llegas a tu destino, y en el primer hueco que ves dejas la moto, ya has aparcado, en cuanto a la libertad... No tienes límites, ya que tu te marcas la frontera, pasas por sitios donde con las cuatro ruedas no llegarías jamás, así que se puede decir que SI eres libre.
Dos historias iguales en las que solo cambia una cosa. La que yo vivo cada día es la primera, pero espero que pronto sea la segunda. Se que es solo cuestión de tiempo.
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SOSIA -
BARBARA CUSTOM